BORDERS habla de la condición humana en las fronteras del mundo. Re-crea de manera sutil las historias verdaderas de personas que han cruzado las fronteras de formas extremas. Las imágenes registran las estrategias y la fuerza de las personas que luchan en la fronteras y evoca, desde la belleza, al ser humano que busca vencer sus circunstancias, por duras que estás sean. Esta serie pretende retratar a ese hombre en fuga que es capaz de hacer cualquier cosa por construir una nueva vida y se pregunta de dónde toma la fuerza para atravesar el trance en el que ya dejó atrás un mundo pero no ha llegado a su destino.

BORDERS habla de la condición humana en las fronteras del mundo. Re-crea de manera sutil las historias verdaderas de personas que han cruzado las fronteras de formas extremas. Las imágenes registran las estrategias y la fuerza de las personas que luchan en la fronteras y evoca, desde la belleza, al ser humano que busca vencer sus circunstancias, por duras que estás sean. Esta serie pretende retratar a ese hombre en fuga que es capaz de hacer cualquier cosa por construir una nueva vida y se pregunta de dónde toma la fuerza para atravesar el trance en el que ya dejó atrás un mundo pero no ha llegado a su destino.

El enigma es vidrio (2015-2016). Esta serie fotográfica explora la teoría del índex como dispositivo pictórico de la imagen. Las imágenes fueron realizadas sin cámara, y son el producto del contacto directo entre el filme de 35 milímetros y el terreno de la ciudad de Atenas. La acción confirma la contigüidad entre lo representado y su referente. El resultado es el documento de esta experiencia: no la imagen perfecta, sino el hilo de Ariadna que la vincula a la memoria; no la mímesis, sino la huella del acto y su presencia.

El enigma es vidrio (2015-2016). Esta serie fotográfica explora la teoría del índex como dispositivo pictórico de la imagen. Las imágenes fueron realizadas sin cámara, y son el producto del contacto directo entre el filme de 35 milímetros y el terreno de la ciudad de Atenas. La acción confirma la contigüidad entre lo representado y su referente. El resultado es el documento de esta experiencia: no la imagen perfecta, sino el hilo de Ariadna que la vincula a la memoria; no la mímesis, sino la huella del acto y su presencia.

Inmerso es un acto en el que confluyen tres ejes que guían el proceso, las sensaciones corporales, el olfato y las emociones.

El entorno se detiene, me observa y lo observo. Me muevo de una y otra forma según el espacio que recorro. Mis pasos fluyen entre lo sutil y lo vigoroso, al unísono con los latidos de mi corazón y la respiración.

Esta serie representa estados físicos y mentales, es como el agua en su estado gaseoso: la única forma de asirla es por medio de la mirada; escapa a un espacio reconocible, y rehúye la idea de puntualizar un lugar definido geográficamente.

Inmerso es un acto en el que confluyen tres ejes que guían el proceso, las sensaciones corporales, el olfato y las emociones.

El entorno se detiene, me observa y lo observo. Me muevo de una y otra forma según el espacio que recorro. Mis pasos fluyen entre lo sutil y lo vigoroso, al unísono con los latidos de mi corazón y la respiración.

Esta serie representa estados físicos y mentales, es como el agua en su estado gaseoso: la única forma de asirla es por medio de la mirada; escapa a un espacio reconocible, y rehúye la idea de puntualizar un lugar definido geográficamente.

El 11 de diciembre del año 2006 el presidente Felipe Calderón hizo oficial su declaración de lucha contra el crimen organizado, en consecuencia, Ciudad Juárez fue una de las primeras localidades en el país en ser ocupada por elementos federales. Para finales del 2011 se contabilizaron más de 11,000 muertos y en el presente las ejecuciones persisten como parte de la cotidianeidad.

Como consecuencia de estos años de ejecuciones, asesinatos y violencia, los espacios inútiles y en desuso le dieron una nueva concepción: la ciudad del abandono. Los sillones en los exteriores, en las aceras, o afuera de las viviendas son una alegoría, un loft ficticio e imaginario de los espacios abandonados que ofrecen confort y seguridad de manera efímera y temporal haciendo una invitación silenciosa a que las personas descansen; cuestionan el momento en que las calles volverán a ser de los ciudadanos, los que hacen, construyen y dan vida a las urbes.

El 11 de diciembre del año 2006 el presidente Felipe Calderón hizo oficial su declaración de lucha contra el crimen organizado, en consecuencia, Ciudad Juárez fue una de las primeras localidades en el país en ser ocupada por elementos federales. Para finales del 2011 se contabilizaron más de 11,000 muertos y en el presente las ejecuciones persisten como parte de la cotidianeidad.

Como consecuencia de estos años de ejecuciones, asesinatos y violencia, los espacios inútiles y en desuso le dieron una nueva concepción: la ciudad del abandono. Los sillones en los exteriores, en las aceras, o afuera de las viviendas son una alegoría, un loft ficticio e imaginario de los espacios abandonados que ofrecen confort y seguridad de manera efímera y temporal haciendo una invitación silenciosa a que las personas descansen; cuestionan el momento en que las calles volverán a ser de los ciudadanos, los que hacen, construyen y dan vida a las urbes.

A partir de los elementos formales que se han utilizado típicamente en las clasificaciones zoológicas, las series “Ornis I” y “Ornis II- la muerte es bella y la eternidad también,” plantean una reflexión sobre la muerte del individuo y lo que queda de él tras la vida. La migración de las aves sigue un orden natural tradicionalmente asociado por el ser humano con la sensación de libertad y con la necesidad intrínseca de desplazarse en busca de cambios. Éstas, quedan transfiguradas y truncadas en las imágenes fotografiadas por Solange Adum en el Museo de Historia Natural de la Universidad Mayor de San Marcos.

Los individuos estáticos representan a familias enteras de animales que aún siguen vivas, cumpliendo con su ciclo natural. La segunda parte de la serie, “Ornis II- la muerte es bella y la eternidad también,” está conformada por ejemplares que fueron fraccionados, desmembrados o heridos y que, aún así, comportan un valor importante dentro de una colección de orden zoológico.

A partir de los elementos formales que se han utilizado típicamente en las clasificaciones zoológicas, las series “Ornis I” y “Ornis II- la muerte es bella y la eternidad también,” plantean una reflexión sobre la muerte del individuo y lo que queda de él tras la vida. La migración de las aves sigue un orden natural tradicionalmente asociado por el ser humano con la sensación de libertad y con la necesidad intrínseca de desplazarse en busca de cambios. Éstas, quedan transfiguradas y truncadas en las imágenes fotografiadas por Solange Adum en el Museo de Historia Natural de la Universidad Mayor de San Marcos.

Los individuos estáticos representan a familias enteras de animales que aún siguen vivas, cumpliendo con su ciclo natural. La segunda parte de la serie, “Ornis II- la muerte es bella y la eternidad también,” está conformada por ejemplares que fueron fraccionados, desmembrados o heridos y que, aún así, comportan un valor importante dentro de una colección de orden zoológico.

Los migrantes centroamericanos que emprenden el viaje a través de México, traen consigo expectativas y temores. El viaje es duro y no hay espacio para un equipaje; sin embargo, siempre llevan algo especial: una imagen, un objeto, memorias materiales que evocan su identidad.

Es un viaje largo que implica pérdidas por lo que a cada paso estos objetos adquieren un mayor valor. Son evidencias de lo que son y las razones por las que deben continuar.

Los migrantes centroamericanos que emprenden el viaje a través de México, traen consigo expectativas y temores. El viaje es duro y no hay espacio para un equipaje; sin embargo, siempre llevan algo especial: una imagen, un objeto, memorias materiales que evocan su identidad.

Es un viaje largo que implica pérdidas por lo que a cada paso estos objetos adquieren un mayor valor. Son evidencias de lo que son y las razones por las que deben continuar.

Punta Paloma (Tarifa), es un paradisíaco enclave en la costa atlántica y española del Estrecho de Gibraltar, a tan solo unos 14km de África. Turistas de todo el mundo vienen a disfrutar de las espectaculares vistas desde lo alto de la gran duna móvil de Valdevaqueros. Esta duna no siempre estuvo ahí. Se empezó a crear en 1940 después de la guerra civil española, por una ambiciosa intervención militar en la zona, debido a un infundado temor a posibles ataques de los aliados franceses e ingleses desde el mar.

En el mismo lugar, en 1988, se encontró por primera vez el cuerpo ahogado de un inmigrante africano. Desde entonces, embarcaciones neumáticas y pateras destrozadas arrastradas por el mar invaden estas playas. Son restos, que la naturaleza parece ayudar a olvidar.

Punta Paloma (Tarifa), es un paradisíaco enclave en la costa atlántica y española del Estrecho de Gibraltar, a tan solo unos 14km de África. Turistas de todo el mundo vienen a disfrutar de las espectaculares vistas desde lo alto de la gran duna móvil de Valdevaqueros. Esta duna no siempre estuvo ahí. Se empezó a crear en 1940 después de la guerra civil española, por una ambiciosa intervención militar en la zona, debido a un infundado temor a posibles ataques de los aliados franceses e ingleses desde el mar.

En el mismo lugar, en 1988, se encontró por primera vez el cuerpo ahogado de un inmigrante africano. Desde entonces, embarcaciones neumáticas y pateras destrozadas arrastradas por el mar invaden estas playas. Son restos, que la naturaleza parece ayudar a olvidar.